PANORAMA DE LA INVESTIGACIÓN EN LAS CIENCIAS DE LA SALUD
La investigación es un proceso complejo que busca bajo contextos metodológicos validados, la comprensión y el análisis de situaciones reales, con la finalidad de generar nuevo conocimiento y evidencias documentales que permitan responder a las necesidades poblacionales e institucionales. En el contexto de la relación salud-enfermedad se identifican procesos dinámicos, determinados entre otros factores, por las condiciones ambientales, sociales, económicas y tecnológicas prevalentes en la región. Estas condiciones demandan soluciones de magnitudes significativas, las cuales, pueden reflejar la relación y el compromiso de las instituciones con la sociedad.
El vigente desarrollo científico y tecnológico en el área de la salud (relevante en la prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de diversos padecimientos) requiere de políticas y estrategias orientadas a la garantía de la calidad, seguridad, disponibilidad y acceso a los diferentes servicios de salud que demandan las principales enfermedades crónico-degenerativas, las emergentes y reemergentes o propias de la región, entre otras. En este sentido, el uso razonado de los recursos y servicios de las instituciones de salud, basado en las necesidades del paciente, requiere de una visión multidisciplinaria, integradora, colegiada y planificada al corto, mediano y largo plazo; situación que requiere de la formación de redes de colaboración y cooperación que busquen la atención pertinente a la salud en sus diferentes ámbitos.
Es por ello, que el desarrollo de la investigación en salud en la región requiere del censo, registro, identificación y reconocimiento de las instituciones y de los recursos humanos en materia de investigación, así como del establecimiento de bases para la generación de cuerpos colegiados y multidisciplinarios, que generen conocimiento enmarcado en el respeto del contexto social, cultural e histórico.
Por otro lado, la generación del conocimiento básico, de frontera y aplicado, debe apegarse a los esquemas metodológicos definidos y establecidos en la literatura, estructurados bajo una visión prospectiva y multidisciplinaria, así como vinculada e instrumentada con los diferentes niveles de formación del capital humano en salud y de los mecanismos de difusión y divulgación científica local e internacional.
La investigación en salud, puede entonces ser visualizada como la herramienta generadora de recursos humanos, instrumentos, metodologías, herramientas y servicios que permiten identificar, transformar y ampliar las fortalezas de la región; esto bajo una perspectiva de aprovechamiento y generación de recursos financieros, orientados al establecimiento de una sociedad basada en el conocimiento.
Otra concepción de la investigación en salud puede visualizarse y analizarse desde tres perspectivas a saber: a) desde la ciencia básica y/o biomedicina (estudio y comprensión genómica, metabolómica, proteómica, celular, tisular de la homeostasis, del estado patológico y de los recursos terapéuticos); b) desde el área clínica (estudio y análisis de las acciones preventivas, diagnósticas y terapéuticas) y c) desde la salud poblacional (conocimiento de la frecuencia y distribución de entidades nosológicas, determinantes de la salud involucrados en éstas, en los diferentes grupos poblacionales y regiones del estado) que demanda servicios de salud. En su conjunto, dichas perspectivas podrían incorporarse y apoyar el desarrollo de políticas de salud, cuyo objetivo podría estar orientado a la comprensión de las dimensiones macro y micro de los procesos sociales, económicos y políticos, vinculados a la solución de necesidades de la población en términos de salud-enfermedad; así como del análisis de la dirección, alcance y magnitud de resultados e impacto de éstos componentes en materia de salud.
A nivel regional, la Universidad de Quintana Roo, a través de la División de Ciencias de la Salud, cuenta con programas y personal académico pertinentes que participan en la formación de recursos humanos en salud (mediante las licenciaturas de Enfermería, Farmacia y Medicina) y que contribuyen al logro de los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo y del Plan Sectorial de Salud 2013-2018, así como del Plan Quintana Roo 2011-2016, en el contexto de esquemas de prestación e innovación de los servicios dirigidos al paciente y procesos de atención.
Actualmente, uno de los retos de México, es la formación de equipos de salud multidisciplinarios para incorporarlos al contexto de la investigación sistemática de los principales problemas de salud. Para ello, el vínculo estrecho entre la Universidad de Quintana Roo y las instituciones de salud de la región permite optimizar los espacios y los medios para la investigación, y simultáneamente, se lleva a cabo la formación de recursos humanos de pregrado y/o posgrado, buscando asegurar resultados terapéuticos óptimos en los pacientes, entre otros resultados. De esta manera, la investigación en salud se lleva a cabo en laboratorios, centros hospitalarios, o con la población abierta, y sitios donde los estudiantes realizan actividades académicas y consolidan conocimientos y competencias profesionales.
Con relación a lo anterior, el desarrollo de diversas líneas de investigación multidisciplinarias generará la creación de posgrados profesionales y de investigación, así como la creación de un centro regional de investigación en salud, con el fin de favorecer la absorción, asimilación y transferencia del conocimiento científico, tecnológico y de innovación en salud, a favor del desarrollo de la comunidad quintanarroense.
Al día de hoy, la replicación histórica de los esquemas de servicios de salud ha permitido atender una alta proporción de las necesidades en este rubro. Sin embargo, el crecimiento, la diversidad y las demandas poblacionales, así como el cumplimiento de los tratados internacionales en servicios y productos, demandan más y mejores esquemas de atención a la salud poblacional. En este sentido, uno de los retos más grandes que enfrenta la investigación en salud, es la incorporación de los resultados e insumos intelectuales a la toma de decisiones sustentada. De igual manera, se debe fortalecer el diseño, ejecución y evaluación de políticas públicas en salud bajo una óptica incluyente, multidisciplinaria y metodológicamente sustentada.